domingo, 26 de septiembre de 2021

EDUCACIÓN POLÍTICA PARA LA INNOVACIÓN @raulamiel

 


#MisNotasDomingueras.- El próximo  Martes 28 de septiembre se conmemoran  40 años del fallecimiento de Rómulo Betancourt.   Junto a Rafael Caldera y Jóvito Villalba, puede ser considerado como uno de los principales artífices de la consolidación de la democracia y del sistema de partidos en la Venezuela del siglo XX. También es considerado como uno de los más grandes políticos que ha tenido el país. Su recuerdo me abre plaza para el tema de hoy.


La innovación política es la restauración de la imaginación política a través del proceso de reconstrucción del tejido social. Ocurre a través del trabajo de ciudadanos que se orientan por una visión de comunidad que reduce las desigualdades y estimula un nivel de participación capaz de madurar la democracia a beneficio de todos.

La educación ideológica y política basada en la vida diaria es una de las tendencias de desarrollo más importantes durante el nuevo período actual. Es un regreso al mundo de la vida, y eso al "humanismo" y la "visión de la vida"; y es una implementación de su participación subjetiva en el mundo de la vida. Implica también, que la educación ideológica y política ha de convertirse realmente en parte de la educación de calidad, para inspirarse en la profundidad de la vida y convertirse en uno de los elementos constitutivos naturales de la vida cotidiana.

La educación ideológica y política es la práctica de la preocupación humanista en lugar de la mera instrucción. Es diferente de las formas tradicionales de educación ideológica y política, que ponen más énfasis en la instrucción. Sostenemos que la educación ideológica y política no desplegará plenamente sus ventajas de preocupación humanista hasta que tomemos en consideración el individuismo, la personalidad, la vida humana, la felicidad y llevamos a cabo la noción de respetar, comprender y preocupar al ser humano en un sentido real.

Sostenemos que el desarrollo de los derechos de ciudadanía en las sociedades avanzadas ha sido acumulativo pero desigual. Se ha detenido la extensión de los derechos sociales / asistenciales. Impulsados por los reclamos formulados por algunos activistas de nuevos movimientos sociales, los derechos de ciudadanía se están expandiendo actualmente hacia un nuevo dominio de derechos culturales que involucran el derecho a la presencia soberana, la representación digna, la propagación de la identidad y el mantenimiento de estilos de vida. Esto refleja la transformación del “asistencialismo”, la "anomia del Estado" y deviene en la expansión de las esferas concurrentes.

Las innovaciones políticas apuntan a fortalecer la democracia, pero pocas se conectan bien con el contexto democrático institucionalizado. 

Los modelos de democracia representativa han demostrado ser notablemente estables en los países europeos y norteamericanos. Se han propagado alternativas como la democracia directa, pero nunca han podido derrocar el modelo dominante de elegir representantes parlamentarios y ejecutivos para actuar en nombre del pueblo. Esto no significa que estas alternativas no hayan tenido ningún efecto. Las peticiones para una participación ciudadana más directa han dado lugar a varias enmiendas en forma de audiencias, referéndum, debates públicos, etc. Estas enmiendas pueden considerarse como procesos de innovación política: se utilizan nuevas ideas para fortalecer la democracia. No solo la falta de fe en la representación existente, sino también la desintegración de la sociedad civil explican la búsqueda de nuevas formas de participación ciudadana y, por tanto, la innovación política ocupa un lugar destacado en la agenda de la ciudadanía en su conjunto.

La interacción entre la vacilante cooperación global y la inestabilidad política nacional requiere buscar formas de mejorar la gobernanza nacional. La afirmación del estado de derecho y la lucha contra la corrupción; regular la interacción entre dinero y política mucho más estrictamente de lo que se hace actualmente; reconocer el papel contralor de los medios de comunicación y tratar el sistema de medios de comunicación como un bien concurrente; desarrollar y profundizar los mecanismos de participación; buscar la emancipación económica, no solo política, mejorando la gobernabilidad en las organizaciones económicas y gubernamentales; reformar sistemas electorales inestables y polarizados con nuevas reglas de votación que favorezcan la construcción de consensos.  Dando por aceptados resultados transparentes. 

Para los republicanos, no es baladí la afirmación básica de nuestro ideario: Un Estado de, por y para el CIUDADANO.

En conclusión, concentrarse en el ciudadano además ofrece beneficios tangibles para el Estado. Igualmente de un capital social significativo en tiempo y dinero; además, la legitimidad de las instituciones gubernamentales estaría correspondida con la certidumbre que los ciudadanos tienen en las mismas. 

Esta semana será crucial para demostrar que grado de madurez han alcanzado la claque política en este país. Les confieso que no tengo grandes esperanzas. Ojala me equivoque. Estaremos expectantes.

Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es Mejor!

domingo, 19 de septiembre de 2021

UN ENFOQUE PROACTIVO Y PRAGMÁTICO PARA EVALUAR Y ADMINISTRAR LA CULTURA POLÍTICA @raulamiel

 

#MisNotasDomingueras.- La efemérides de hoy nos dice que hoy 19 de septiembre, hace 246 años nació en Caracas el apasionado defensor de la libertad e ilustre prócer de la independencia nacional, José Félix Ribas. Quien fuera uno de los héroes venezolanos más importantes de la primera parte de la Independencia. Defendió apasionadamente la causa republicana a extremos radicales. Desempeñó varios cargos militares demostrando pericia en esa dirección. Tuvo un rol importante en la Campaña Admirable y se destacó por su participación en las batallas de La Victoria e Urica.  Murió delatado.

En una maraña mundial de agitación sin precedentes, conectividad instantánea, interdependencia cada vez mayor y problemas transculturales que demandan cada vez más políticas transnacionales, es tiempo de que el liderazgo político muestre más creatividad y busque la legitimidad de fuentes más constructivas que de la exclusión continúa de los otros. 

Las circunstancias difíciles suelen dar origen a cambios de paradigma, a marcos de referencia totalmente nuevos, a través de los cuales la gente ve el mundo, se ve a sí misma y ve a los otros y lo que la vida le pide. Cierto es que la cultura puede ser compleja de advertir y evaluar, ya que incluye no solo las conductas visibles, sino también las reglas, las ideas, las normas y las creencias inconscientes no expresadas. Afortunadamente, todavía se puede abordar de manera efectiva con los enfoques correctos. 

Nuestra naturaleza básica consiste en actuar, no en que se actúe por nosotros. Esto nos permite elegir nuestras respuestas a circunstancias particulares y, además, nos da poder para crear las propias circunstancias. Tomar la iniciativa significa reconocer nuestra responsabilidad de hacer que las cosas sucedan.

Un enfoque proactivo consistiría en cambiar de dentro hacia fuera. El enfoque proactivo propone ser distinto, y de esta manera provocar un cambio positivo en lo que está fuera: puedo ser más ingenioso, más diligente, más creativo, más cooperativo.     

El paradigma de la "cultura estratégica" fue acuñado por Jack Snyder de 1977, como la "suma total de ideales, respuestas emocionales condicionales y patrones de comportamiento habitual que los miembros de la comunidad estratégica nacional han adquirido a través de la instrucción o imitación y se comparten entre sí con respecto a la estrategia". La cultura estratégica se definió así como una particular visión de seguridad y de acción militar, que se hizo influyente para los responsables políticos. La resistencia de tales modos de pensamiento yo los califico como manifestaciones de una "cultura", en lugar de mera política.

En el mundo de hoy, los juegos de suma cero deben dar paso a un  paradigma de seguridad de múltiples sumas, que en mi real saber y entender, abarca las cinco dimensiones de la seguridad global: seguridad nacional, transnacional, humana, ambiental y transcultural. Además, la búsqueda de soluciones beneficiosas para todos y de la justicia (tanto a nivel nacional como internacional) no solo es deseable sino que también sirve cada vez más a intereses estatales realistas. En eso que llamamos la paz del mundo. Y el devenir de la prosperidad universal. Las culturas estratégicas son, por lo tanto, nociones dinámicas y en constante evolución y comprensión de la historia y el lugar de un país en el mundo, a menudo negociadas y reevaluadas entre generaciones. Sin embargo, a pesar de tales fluctuaciones, es difícil refutar que los países mantengan algunas visiones persistentes y recurrentes de su función de seguridad y geopolítica, que trascienden los partidos políticos y los ciclos electorales. La importancia de la cultura estratégica no puede pasarse por alto a pesar del hecho de que las actividades pragmáticas y otros cálculos estratégicos a menudo parecen estar dictados únicamente por lógicos intereses inmediatos.

Cada vez más, a medida que los intereses, económico y de seguridad, dependen de las formas internacionales y transnacionales de cooperación, los estados deben reconciliar sus narraciones históricas con las realidades de nuestros tiempos. El pragmatismo debe acomodarse dentro de marcos competitivos.  Las incompatibilidades ideológicas, la desconfianza y las divisiones históricas pueden permanecer entre los estados, pero la competencia debe resolverse con una fórmula de  realismo simbiótico que a menudo desafían al propio Estado.

En política, el pragmatismo es una forma actuar, conducirse o tomar decisiones según la cual el único criterio válido para juzgar la validez o verdad de cualquier acción es considerar sus efectos prácticos. En este sentido, para el pragmatismo político lo cierto es lo funcional. De allí que prescinda de ideologías definitivas y dogmatismos, y opte por hacer aquello que parece más conveniente de acuerdo a las circunstancias.

Si como pragmatismo se denomina el tipo de actitud y pensamiento según el cual las cosas solamente tienen un valor en función de su utilidad. Entonces entendemos que  el pragmatismo modera lo verdadero a lo útil y considera que la verdad del conocimiento se encuentra precisamente en aquello que tiene un valor práctico para la vida. Como tal, el pragmatismo es también aplicable a la economía, la educación y el derecho.

Yo diría que incluso en nuestro ejercicio diario de transito de vida. Las personas pragmáticas se caracterizan por aprovechar cada oportunidad con la finalidad de obtener un fin útil, o un beneficio propio. Circunstancias de la vida que exigen que la gente sea hábil, práctica y eficiente para lograr los objetivos definidos.

De este modo, el pragmatismo desecha la existencia de verdades absolutas e inobjetables. Al contrario, considera que las ideas son provisionales y están siempre sujetas al cambio, pues entiende que una investigación futura podría modificarlas.

Para finalizar. A veces se ha dicho que hay tantos pragmatismos como pragmatistas. También en la cuestión de la verdad, las diferencias son evidentes. Cómo lidiar con los desacuerdos es un desafío urgente de nuestro tiempo. Sin reglas básicas para decidir sobre reclamos en competencia, las decisiones se toman por la fuerza y ​​ los prejuicios florecen. El pragmatismo es un intento de superar este problema. Como enfoque filosófico, significa más que una voluntad de compromiso. Requiere una forma distintiva de comprender. La verdad que comienza con el examen de la diferencia práctica que hacen las ideas o creencias. En eso estamos al día de hoy. Ya veremos los resultados.

Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es mejor!

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

viernes, 17 de septiembre de 2021

BREVE HISTORIA DEL ILUSTRE CARLOS RANGEL @raulamiel

 

Carlos Rangel nació el 17 de Septiembre de 1929, en Caracas, es uno de los intelectuales más trascendentales que ha dado Venezuela y el pensamiento hispanoamericano. Abanderado de ideas liberales, defensa de la libertad y de los valores democráticos, respeto al proyecto de vida de cada persona que revierte en la formación de sociedades responsables de si mismas. Sociedad civil plenamente conciente de su soberanía y su capacidad de acción política, dónde se valore el respeto al merito, el esfuerzo y la creatividad de sus ciudadanos.

Creía en una economía libre y coherente que permita hacer realidad, sin destruir nuestro planeta ni convertir a los ciudadanos en vasallos o esclavos, la dignidad que requiere que la vida se pueda llamar así, vida fue columnista en varios diarios Venezolanos e Internacionales. Dirigió la revista momento. Junto a su esposa Sofía Imber condujo el programa de opinión Buenos Días. En 1976 dio nacimiento a su libro Del buen salvaje al buen revolucionario, obra imprescindible en el pensamiento político universal.

Critico fervientemente al empresario acostumbrado al proteccionismo del Estado, nefasto que la responsabilidad pública sirva para enriquecerse y traicionar a la libertad.  

 Ésta es su vida, ésta su libertad

                                  https://youtu.be/lNmeD7rJJHs 

 

domingo, 5 de septiembre de 2021

NEGRITO, CON LECHE O MARRÓN @raulamiel

MisNotasDomigueras.- Llegamos a septiembre. Mes prolijo en efemérides muy interesantes. Habrá de toda especie y categorías. Les sugiero repasarlas.  Además del Día Mundial de la Barba que se celebra todos los años el primer sábado de septiembre hasta el día de la Secretaria. Pasando por el celebrativo de la Virgen del Valle y de la de Coromoto, Patrona de Venezuela. La Carta de Jamaica, escrita por Simón Bolívar y pare de contar. Hay una que particularmente me viene al propósito de la crónica de hoy. La del 7 de septiembre de 1814: El Libertador Simón Bolívar escribe El Manifiesto de Carúpanodocumento explicando el fracaso de la Segunda República.

Con este documento Bolívar buscaba no solo la libertad sino el apoyo incondicional de su pueblo y de sus amigos. Aparte en su documento le hacía crítica a varias cosas. Como el ejército que a pesar de que algunos venezolanos de ese tiempo hacían lo que podían por él le faltaba mucho orden. En síntesis había muchos problemas en ese tiempo, que no permitieron que la segunda República avanzara y eso en verdad no fue culpa de Bolívar; entonces él quiso que todo quedase por escrito y que se pudiera analizar logística e intelectualmente el escrito. En este manifiesto Bolívar se quejaba de la justicia de los hombres, y abogaba por la justicia divina, expresa que sus ciudadanos venezolanos no estaban preparados para el ejercicio de la Justicia. Por lo tanto, no eran capaces de desarrollar sus propias leyes, lo que significa que no podían entender el verdadero significado de la libertad, la cual se basa en el ejercicio práctico y no solo en palabras. Siendo este el caso, Bolívar debe obligar a sus compatriotas venezolanos a asumir el ejercicio de la libertad, a pesar de su falta de aprecio ante la misma.

A veces pienso que habría que dar un paso atrás y preguntarte si las condiciones que dieron origen al chavismo han sido “superadas”. Me inclino a creer que muchos aspectos de esa simbolización siguen incubados, sin desarrollo: el principal de ellos, el de los medios o condiciones para la acción política, es decir el tema de los partidos.

En los últimos tiempos, la corrupción ligada a la política, en el mundo y nuestro entorno hemisférico, se ha vuelto un asunto de grandes dimensiones y sobre el cual no podemos ser indiferentes. No solo por tratarse de un tema de carácter moral y/o legal, sino también porque sus efectos económico-sociales son, las más de las veces, nefastos.

Venezuela es el espeluznante final de la política moderna. Los ciudadanos de una Nación que alguna vez fue próspera viven en medio de los estragos de la demolición de toda institucionalidad. Ha sido y es tan implacable, que nos están llevando a la destrucción total. 

Venezuela no es una idea. Es un lugar real, lleno de personas reales que están pasando por una crisis sin precedentes y, de alguna manera, muy inquietante. Si simboliza algo, es el poder distorsionado de los símbolos. En realidad, el país no ofrece consuelo a quienes a habitamos aquí.

Aquí ya, si vamos como tren bala. Quienes defendemos los preceptos del Republicanismo Liberal estamos obligados a usar todas las herramientas disponibles para una verdadera difusión de nuestra propuesta.  Si, con coraje y determinación, patrocinamos nuestras convicciones a capa y espada.

Estoy tentado a terminar aquí con una advertencia, porque Venezuela representa la conclusión de muchos procesos que vemos en el mundo de hoy. Venezuela es el final del marxismo ideológico; la culminación del asalto a la democracia, los tribunales y la prensa que ahora se desarrolla en tantos países; y el límite exterior de la política de polarización. Pero no quiero, como tantos lo han hecho, tratar a Venezuela como un simple símbolo. Es un lugar real, y las dificultades que enfrentamos las personas que vivimos aquí no han terminado, culminado o limitado en absoluto. Independientemente de lo que hagan los de la comunidad internacional en Venezuela y los avances del diálogo en México, el objetivo debe ser ayudar con nuestras consideraciones, a promover un argumento ideológico factible para el cambio, especialmente a medida que la crisis humanitaria y política se profundiza y se extiende.

Estamos alineados para la gran y hermosa obra de reconstrucción de la República con una verdadera y sólida democracia. En ese propósito insistimos en  convocar a la participación masiva a las elecciones regionales del próximo 21 de noviembre. Ojala prive la sensatez y nos presentemos con la mayor UNIDAD posible. Lo ideal sería total UNIDAD. Si eso ocurre será un paso muy importante. Ganar el mayor número de alcaldías y gobernaciones. Mostrar el verdadero músculo de una oposición consciente de su responsabilidad ante el país. Si la “Oposición” logra nuclear alrededor de candidatos únicos, y consigue formar un buen equipo para vigilar las elecciones regionales, hallará una oportunidad de oro para la disidencia venezolana y para reivindicarse frente a ésta. Sólo eso exigen los ciudadanos  “por ahora”.

Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es mejor!